Cien años luego de su concepción y de varios intentos por llevarlo a la pantalla grande, el personaje de la serie de novelas de Edgar Rice Burroughs hace su entrada al mundo del cine. ¿Será esta historia que inspirara muchos otros argumentos de ciencia ficción digna de llevar el legado que se le acredita, o es ya una entrada muy tardía para nuestra época?
Un veterano de la guerra civil es transportado a Marte, planeta poblado por habitantes de diferentes razas y clases en conflicto y en el cual este hombre que nunca quiso pelear en la guerra de la que escapó en la tierra será el arma más importante para evitar el final de una civilización, y encontrar una nueva causa en el proceso.
A simple vista John Carter puede pintarse como otro trillado "viaje del héroe", y en gran parte lo es, tomando en cuenta que su historia de origen fue publicada en 1912 e inspiró muchas de las operas espaciales más queridas del cine como Star Wars y más recientemente Avatar, pero aún así esta adaptación con años de retraso logra capturar la atención del espectador.
John Carter (Taylor Kitch) es un hombre que transpira indiferencia ante la situación de los habitantes de un planeta que lo ven como el guerrero que puede darles la ventaja en un conflicto que parece perdido, aún así muestra en muchas ocasiones que tiene un corazón que esta dispuesto a ayudar a los que lo necesitan. Y mientras la película avanza y pequeños flashbacks muestran las razones por las que Carter detesta tanto la guerra, cual sea y donde sea, no puedes sino mostrar simpatía por un hombre que lo ha perdido todo y esta sin saberlo en busca de un propósito.
Dejah Thoris (Lynn Collins), La princessa de Helium, no es la típica damisela en peligro, y si bien tuvo sus momentos de alaridos de ayuda en los que Carter tuvo que llegar a su rescate, se mostró como una guerrera y científica competente, cuyos roces de actitud con el personaje principal y el resto del elenco la mostraron como una mujer con su ideales y convicciones bien cementadas, al punto de impresionar al héroe de la historia, pero al mismo tiempo mostrando una vulnerabilidad en momentos emocionalmente fuertes y una presencia que se robaba el show cuando aparecía en pantalla.
Los Tharks, personajes que acogieron a Carter en sus filas durante gran parte de la película fueron también un aspecto interesante, encabezados por Tars Tarkas (Willem Dafoe) quien demuestra una bondad poco habitual en un pueblo que ve ese tipo de sentimientos como debilidad, al igual que Sola (Samantha Morton), a que le toca cuidar a Carter por buena parte del film.
Mark Strong (Matai Shang) se robo el papel de villano principal como uno de los Thern, y Dominic West hizo un papel competente como el príncipe de Zodanga, el pueblo en conflicto con Helium.
La película visualmente se sintió épica con diversas locaciones, tanto en los terrenos áridos de Barsoom (Marte) hasta los palacios de Helium y las estructurasde Zodanga, al punto que laversión 3D no es necesaria, e incluso puede evitar que disfrutes de esta película en una versión 2D muy superior. Las batallas aéreas y en campo también fueron bastante bien ejecutadas, con todo y que se utilizaron recursos visuales para que no se sintieran tan sanguinarias como en las historias originales.
Si bien el recurso narrativo utilizado al comienzo y el final para muchos resulte muy cursi, para los que abracen el origen pulp de la historia no lo verán como una desventaja, sino como un homenaje a la época en la cual se originó el relato.
Año: 2012
Director: Andrew Stanton
Elenco: Taylor Kitch, Lynn Collins, Willem Dafoe, Dominic West, Mark Strong
Un veterano de la guerra civil es transportado a Marte, planeta poblado por habitantes de diferentes razas y clases en conflicto y en el cual este hombre que nunca quiso pelear en la guerra de la que escapó en la tierra será el arma más importante para evitar el final de una civilización, y encontrar una nueva causa en el proceso.
A simple vista John Carter puede pintarse como otro trillado "viaje del héroe", y en gran parte lo es, tomando en cuenta que su historia de origen fue publicada en 1912 e inspiró muchas de las operas espaciales más queridas del cine como Star Wars y más recientemente Avatar, pero aún así esta adaptación con años de retraso logra capturar la atención del espectador.
John Carter (Taylor Kitch) es un hombre que transpira indiferencia ante la situación de los habitantes de un planeta que lo ven como el guerrero que puede darles la ventaja en un conflicto que parece perdido, aún así muestra en muchas ocasiones que tiene un corazón que esta dispuesto a ayudar a los que lo necesitan. Y mientras la película avanza y pequeños flashbacks muestran las razones por las que Carter detesta tanto la guerra, cual sea y donde sea, no puedes sino mostrar simpatía por un hombre que lo ha perdido todo y esta sin saberlo en busca de un propósito.
Dejah Thoris (Lynn Collins), La princessa de Helium, no es la típica damisela en peligro, y si bien tuvo sus momentos de alaridos de ayuda en los que Carter tuvo que llegar a su rescate, se mostró como una guerrera y científica competente, cuyos roces de actitud con el personaje principal y el resto del elenco la mostraron como una mujer con su ideales y convicciones bien cementadas, al punto de impresionar al héroe de la historia, pero al mismo tiempo mostrando una vulnerabilidad en momentos emocionalmente fuertes y una presencia que se robaba el show cuando aparecía en pantalla.
Los Tharks, personajes que acogieron a Carter en sus filas durante gran parte de la película fueron también un aspecto interesante, encabezados por Tars Tarkas (Willem Dafoe) quien demuestra una bondad poco habitual en un pueblo que ve ese tipo de sentimientos como debilidad, al igual que Sola (Samantha Morton), a que le toca cuidar a Carter por buena parte del film.
Mark Strong (Matai Shang) se robo el papel de villano principal como uno de los Thern, y Dominic West hizo un papel competente como el príncipe de Zodanga, el pueblo en conflicto con Helium.
La película visualmente se sintió épica con diversas locaciones, tanto en los terrenos áridos de Barsoom (Marte) hasta los palacios de Helium y las estructurasde Zodanga, al punto que laversión 3D no es necesaria, e incluso puede evitar que disfrutes de esta película en una versión 2D muy superior. Las batallas aéreas y en campo también fueron bastante bien ejecutadas, con todo y que se utilizaron recursos visuales para que no se sintieran tan sanguinarias como en las historias originales.
Si bien el recurso narrativo utilizado al comienzo y el final para muchos resulte muy cursi, para los que abracen el origen pulp de la historia no lo verán como una desventaja, sino como un homenaje a la época en la cual se originó el relato.
Me gusto que Andrew Stanton, verterano de PIXAR le dedicó el film a Steve Jobs, quedénse durante los créditos para ver la pequeña muestra de aprecio al creador de PIXAR.
Veredicto: 4/5
El director Andrew Stanton logra desarrollar una historia con años esperando llegar al cine, y aunque no es perfecta, mezcla nuevos elementos con la historia original para transportarnos a otro planeta junto a John Carter, y maravillarnos con sus paisajes, su gente y su historia de fantasía romántica y acción que nos recuerda lo genial de la imaginación. Date una vuelta por Barsoom junto con John, Dejah y el resto de los habitantes de este universo creado por E. R. Burroughs.
Si todavía no estás convencido escucha lo que tiene que decir el elenco y el equipo de producción en este video.
