Construct: Hijo De Tigre...



El increíble flujo de noticias de cómics, cine y cultura popular de las pasadas dos semana ha sido bueno, pero no me había permitido tomar un break para retomar una de las secciones con las que comenzamos el blog y que es parte de la esencia del mismo, los Constructs. Aquí uno de varios que quiero estar subiendo mis últimos días de vacaciones, antes de regresar  al "yugo" como alguno conocidos le llaman.


El lunes de la semana pasada me encontraba en la ciudad y luego de un tiempo evangelístico para celebrar el inicio oficial de mis vacaciones, me retiro a una parada para tomar un auto bus , pare ce que por alguna razón este día había menos transportes disponibles, y los que habían llegaban llenos a la parada donde estaba, así que decidí caminar, y caminar, y caminar hasta llegar a una parada donde los buses se detuvieran y estuvieran algo vacíos, casi llego caminando a la terminal (lo último es exagración).

Al subirme a un bus de una ruta que pasaba por mi destino, noto que se llena a su capacidad de inmediato y en las siguientes tres paradas no se detiene para nada, hasta llegar a una parada en la cual decide recoger gente, con el bus lleno hasta la puerta, por lo que inmediatamente la gente comienza  a protestar diciendo que ya no cabe nadie, un señor entrado en edad se une a la queja llamando codicioso al busero que no avanza. La respuesta del busero, la clásica "hay dos barras" (pero un solo pasillo) es seguida por el descontento en aumento de los pasajeros que ya empezaban a entender como se siente una tuna dentro de la lata. El busero responde apagando la m´quina del bus y diciendo que no va para ningun lado.

Varia gente se baja molesta, entre ellos el señor entrado en años que le repite en su cara que es un codicioso que no sabe tratar a sus pasajeros, el busero se queda callado mientras el señor baja y camina de vuelta a la parada donde se subio al bus. Cuando va pasando por la parte trasera del bus, el PAVO, un muchacho que no pasaba de los 12 años, abre la puerta  trasera de emergencia y estuvo a punto de insultar a la progenitora del señor (empezó la frase), pero es de tenido por otro pasajero en el interior del autobus que le cierra en la cara la puerta y lo reprende, sin insultos solo preguntándole: "¿quién te crees tú para faltarle al respeto a una persona mayor?". El PAVO mira asustado al pasajero, se da la vuelta y se devuelve al frente, pero cuando está a una distancia considerable insulta en voz baja al pasajero, que jameas escucharía donde estaba lo que dijo, por el tono  "tan valiente" con que hablo.

El busero indignado apaga la maquina del bus denuevo, porque el PAVO al que le hablaron fuerte resulta ser SU HIJO.

Más gente se baja del bus indignada hasta que queda el pasillo vacío el bus arranca y sigue su camino como si nada hubiera pasado, en ningún momento del viaje vi al busero, ni a la madre del chaval (que estaba ebn los puestos de enfrente) reprender al muchacho por su conducta. Sólo me quedo cuando baje del transporte tomar su placa y número de serie y poner la denuncia.

Lo triste de esta escena es que por mucho que quisieramos aconductar al chaval ese, los mismos padres no tienen autoridad para hacerlo, porque la misma conducta que tuvo el busero, la tuvo el hijo, solo que el hijo fue más desmedido en su comportamiento, ya que sus padres no tinene autoridad para reprender, con su ejemplo de vida.

Y este caso se repite en muchos hogares y diferentes entornos, pareciendo que estamos criando delincuentes y animales, cuando el deber de un padre no es solo llevar la comida a la casa, sino que sus hijos crezcan para ser mejores seres humanos que uno, evitando que cometan los mismo errores que nosotros, y que tengan mejores oportunidades. Pero ya los padres han perdido ese rol, o han querido no tomarlo y generación tras generación estamos viendo el resultado.

¿Por qué no queremos tomar esa responsabilidad como adultos?, porque el ser un buen modelo a seguir requiere sacrificio, el buscar ser mejor cada día y esforzarse en inculcarle eso a los pequeños, es invertir tiempo, pero eso le toca a los padres o acudientes, eso se aprende en la casa, porque muchas personas en la escuela, en la calle pueden llamarle la atención a un joven, tratar que enderece el camino, pero si cuando regresa a su hogar y no ve un buen modelo a seguir, va a ser difícil que el hijo del tigre no salga rayado.

"Es Un favor que el hombre honrado me castigue, un perfume delicado que me reprenda. Tales cosas no rechazaré, a pesar de sus golpes, seguiré orando."
-Salmo 141:5